X-Ray/Radiography[:es]Rayos X/Radiografía

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Radiographic Testing (RT), or industrial radiography, is a nondestructive testing (NDT) method of inspecting materials for hidden flaws by using the ability of short wavelength electromagnetic radiation (high energy photons) to penetrate various materials.

Either an X-ray machine or a radioactive source, like Ir-192, Co-60, or in rarer cases Cs-137 are used in a X-ray computed tomography machine as a source of photons. Neutron radiographic testing (NR) is a variant of radiographic testing which uses neutrons instead of photons to penetrate materials. This can see very different things from X-rays, because neutrons can pass with ease through lead and steel but are stopped by plastics, water and oils. Most industries are moving from film based radiography to a digital sensor based radiography much the same way that traditional photography has made this move.

Since the amount of radiation emerging from the opposite side of the material can be detected and measured, variations in this amount (or intensity) of radiation are used to determine thickness or composition of material. Penetrating radiations are those restricted to that part of the electromagnetic spectrum of wavelength less than about 10 nanometres.

The beam of radiation must be directed to the middle of the section under examination and must be normal to the material surface at that point, except in special techniques where known defects are best revealed by a different alignment of the beam. The length of weld under examination for each exposure shall be such that the thickness of the material at the diagnostic extremities, measured in the direction of the incident beam, does not exceed the actual thickness at that point by more than 6%. The specimen to be inspected is placed between the source of radiation and the detecting device, usually the film in a light tight holder or cassette, and the radiation is allowed to penetrate the part for the required length of time to be adequately recorded.

The result is a two-dimensional projection of the part onto the film, producing a latent image of varying densities according to the amount of radiationreaching each area. It is known as a radio graph, as distinct from a photograph produced by light. Because film is cumulative in its response (the exposure increasing as it absorbs more radiation), relatively weak radiation can be detected by prolonging the exposure until the film can record an image that will be visible after development. The radiograph is examined as a negative, without printing as a positive as in photography. This is because, in printing, some of the detail is always lost and no useful purpose is served.

Before commencing a radiographic examination, it is always advisable to examine the component with one’s own eyes, to eliminate any possible external defects. If the surface of a weld is too irregular, it may be desirable to grind it to obtain a smooth finish, but this is likely to be limited to those cases in which the surface irregularities (which will be visible on the radio graph) may make detecting internal defects difficult.

After this visual examination, the operator will have a clear idea of the possibilities of access to the two faces of the weld, which is important both for the setting up of the equipment and for the choice of the most appropriate technique.

Defects such as delaminations and planar cracks are difficult to detect using radiography, particularly to the untrained eye.

Without overlooking the negatives of radiographic inspection, Radiography does hold many significant benefits over ultrasonics, particularly insomuch that as a ‘picture’ is produced, more accurate identification of the defect can be made, and by more interpreters. Very important as most construction standards permit some level of defect acceptance, depending on the type and size of the defect.

To the trained Radiographer, subtle variations in visible film density provide the technician the ability to not only accurately locate a defect, but identify its type, size and location; an interpretation that can be physically reviewed and confirmed by others, possibly eliminating the need for expensive and unnecessary repairs.

[:es]

La prueba radiográfica (RT), o radiografía industrial, es un método de prueba no destructiva (NDT) para inspeccionar materiales en busca de fallas ocultas mediante el uso de la capacidad de radiación electromagnética de longitud de onda corta (fotones de alta energía) para penetrar varios materiales.

Ya sea una máquina de rayos X o una fuente radiactiva, como Ir-192, Co-60, o en casos más raros, Cs-137 se utilizan en una máquina de tomografía computarizada de rayos X como fuente de fotones. La prueba radiográfica de neutrones (NR) es una variante de la prueba radiográfica que utiliza neutrones en lugar de fotones para penetrar los materiales. Esto puede ver cosas muy diferentes de los rayos X, porque los neutrones pueden pasar con facilidad a través del plomo y el acero, pero son detenidos por los plásticos, el agua y los aceites. La mayoría de las industrias están pasando de la radiografía basada en películas a una radiografía basada en sensores digitales de la misma manera que la fotografía tradicional ha hecho este movimiento.

Dado que la cantidad de radiación que emerge del lado opuesto del material puede detectarse y medirse, las variaciones en esta cantidad (o intensidad) de radiación se utilizan para determinar el grosor o la composición del material. Las radiaciones penetrantes son aquellas restringidas a esa parte del espectro electromagnético de longitud de onda inferior a aproximadamente 10 nanómetros.

El haz de radiación debe dirigirse hacia el centro de la sección bajo examen y debe ser normal a la superficie del material en ese punto, excepto en técnicas especiales donde los defectos conocidos se revelan mejor por una alineación diferente del haz. La longitud de la soldadura bajo examen para cada exposición debe ser tal que el grosor del material en las extremidades de diagnóstico, medido en la dirección del haz incidente, no exceda el grosor real en ese punto en más del 6%. El espécimen a inspeccionar se coloca entre la fuente de radiación y el dispositivo de detección, generalmente la película en un soporte o cassette hermético a la luz, y se permite que la radiación penetre en la parte durante el tiempo requerido para que se registre adecuadamente.

El resultado es una proyección bidimensional de la pieza sobre la película, produciendo una imagen latente de diferentes densidades de acuerdo con la cantidad de radiación que alcanza cada área. Es conocido como un gráfico de radio, a diferencia de una fotografía producida por la luz. Debido a que la respuesta de la película es acumulativa (la exposición aumenta a medida que absorbe más radiación), se puede detectar una radiación relativamente débil prolongando la exposición hasta que la película pueda grabar una imagen que será visible después del desarrollo. La radiografía se examina como negativa, sin imprimir tan positiva como en la fotografía. Esto se debe a que, en la impresión, algunos de los detalles siempre se pierden y no se cumple ningún propósito útil.

Antes de comenzar un examen radiográfico, siempre es aconsejable examinar el componente con los propios ojos, para eliminar cualquier posible defecto externo. Si la superficie de una soldadura es demasiado irregular, puede ser conveniente molerla para obtener un acabado liso, pero es probable que se limite a aquellos casos en que las irregularidades de la superficie (que serán visibles en el gráfico de radio) Detección de defectos internos difíciles.

Después de este examen visual, el operador tendrá una idea clara de las posibilidades de acceso a las dos caras de la soldadura, lo cual es importante tanto para la configuración del equipo como para la elección de la técnica más adecuada.

Los defectos como las delaminaciones y las grietas planas son difíciles de detectar mediante radiografía, especialmente en el ojo no entrenado.

Sin pasar por alto los aspectos negativos de la inspección radiográfica, la radiografía tiene muchos beneficios significativos sobre los ultrasonidos, particularmente en la medida en que se produce una ‘imagen’, se puede hacer una identificación más precisa del defecto y por más intérpretes. Muy importante ya que la mayoría de los estándares de construcción permiten cierto nivel de aceptación de defectos, dependiendo del tipo y tamaño del defecto.

Para el radiógrafo capacitado, las variaciones sutiles en la densidad de la película visible le brindan al técnico la capacidad no solo de localizar con precisión un defecto, sino también de identificar su tipo, tamaño y ubicación; Una interpretación que puede ser revisada y confirmada físicamente por otros, posiblemente eliminando la necesidad de reparaciones costosas e innecesarias.

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